Un viaje a mi Interior...
- Monica Vettorazzi de Ritz

- 6 jun 2019
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 23 abr
Después de plantear el cuestionamiento de búsqueda: ¿quién soy yo? la propuesta es iniciar un viaje. Esa trayectoria es de una interiorización que conllevará gran análisis mental y emocional. Cada diseño de vida es único y personal. Se torna una tarea desafiante pero invaluable en términos de crecimiento integral.
Las tres conciencias que conforman nuestro ser: mente, cuerpo y alma ofrecen indescriptibles viajes a nuestro interior. Cada una conlleva conocimiento profundo a estudiar y trabajar. He de decir que el ser está provisto de toda esa sabiduría por creación divina.
A nivel mental, se trabaja evaluando pensamientos y emociones como los principales elementos del ego. Los pensamientos son fotones informativos que se disparan a través de las percepciones concebidas dentro de lo que el ser vive. Las emociones son las sensaciones emitidas por el sistema sensorial, que acompañan intrínsecamente a los pensamientos. Este dúo coexiste en una dinámica muy propia, brindándole al sistema llamado ser, una información que el ego la capta como “la realidad”.
A nivel de cuerpo, la comunicación es compleja. El cuerpo tiene un sistema biológico muy propio de detección y manifestación. Descifrarlo conlleva, estudiar los conceptos básicos para saber decodificar la información y llevarla a que ésta haga una conexión directa (conciencia) con la situación vivida.
A nivel del alma, el tema es la sanación a través del perdón. Ese viaje es una decisión muy importante y decisiva para la evolución espiritual del ser. Aquí es donde se manifiesta la premisa de que somos seres espirituales con una experiencia terrenal. Es saber con total claridad que si no descubro mi esencia interior, por ende no sabré mi propósito de vida. Esta fase de interiorización es la más apasionante de las tres. Acá es donde la persona se encuentra consigo misma y valida su existencia en varios y diferentes planos existenciales.
La idea es proporcionar conocimiento y herramientas que faciliten este viaje al interior y primordialmente, que sea en plena conciencia. Considero que la herramienta más importante para este viaje, es el aprender a dialogar con cada una de estas tres partes que conforman mi ser. El diálogo debe ser desde el amor. Dignificando a cada conciencia que me conforma. Sólo yo puedo emprender el viaje a mi interior e igualmente, sólo yo soy el que puede decodificar, interpretar y asumir mi realidad específica.
Todo viaje debe ser planificado con tiempo, ¿crees tener el tiempo y la visión para iniciar el tuyo?





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